Derechos Culturales y Constitución: Ricardo Pita, “se hace difícil hablar de trabajo digno en el sector cultural”

Por Ricardo Pita

El Observatorio ha realizado diversas entrevistas a artistas, gestores e investigadores del arte y la cultura sobre los Derechos Culturales en la Constitución con el propósito de comprender su alcance y aplicación en el país, así como identificar las deficiencias y vulneraciones de los mismos.

Derecho al trabajo digno en el sector cultural

El cantautor ecuatoriano Ricardo Pita reflexiona sobre la importancia de los derechos culturales y el trabajo digno dentro del sector artístico, en el marco de la convocatoria a una nueva Consulta Popular Nacional que busca aprobar la redacción de una nueva Constitución.

“A mi criterio, la cultura es el alma de un pueblo. Nuestra identidad viene directamente de la capacidad de reconocernos: reconocernos en quienes hemos sido, quienes somos y hacia dónde estamos yendo”, señala Pita.

El artista advierte que la pérdida de identidad cultural tiene consecuencias profundas:

“Si se empieza a borrar nuestra identidad, somos como una masa moldeable, con todo lo que nos propone lo que suena en nuestros parlantes, lo que vemos en nuestras pantallas. Creo que el problema que afrontamos en este momento de delincuencia sin precedentes, de menores de edad inmiscuidos en esa delincuencia, es el resultado directo de ser afectados por esa cultura”.

Pita sostiene que la educación y la cultura son derechos fundamentales que no están siendo respetados:

“Tenemos un derecho a la educación y a la cultura que no está siendo respetado y que nos está llevando a una decadencia completa, donde ya no nos reconocemos como sociedad, donde nada fuera de once compatriotas pateando una pelota nos une. ¿Qué somos si no tenemos cultura?”, se pregunta.

En Ecuador, el derecho al trabajo digno en el sector cultural se fundamenta en la Constitución y busca garantizarse a través de la Ley Orgánica de Cultura y normativas sectoriales que contemplan la inclusión en el régimen laboral, la seguridad social y el fomento de la creación artística. Se han implementado herramientas como el Registro Único de Artistas y Gestores Culturales (RUAC), que permite la inscripción voluntaria de trabajadores del arte y la cultura. Sin embargo, persisten desafíos importantes: la alta tasa de artistas sin seguridad social, las brechas de acceso a derechos laborales y la necesidad de reformar la Ley de Cultura para ampliar la protección del sector.

Sobre las condiciones laborales actuales, Pita comparte su experiencia personal:

“Se hace difícil hablar de trabajo digno en el sector cultural para un cantor que ha dedicado su vida a su arte y a representar al Ecuador en tantas ocasiones en el exterior, y que si bien ha logrado independencia económica y laboral, es porque no tiene ni casa ni ningún tipo de bien material”.

El músico recuerda su trayectoria:

“He representado al país en festivales y giras por Chile, Argentina, Uruguay, Perú, Colombia, Francia, España y Brasil. Soy el ganador del VII Premio IBERMÚSICAS a la creación de canciones. He compartido escenario con los más grandes representantes de la canción latinoamericana como Jorge Drexler, Totó la Momposina o Luis Alberto Spinetta, y aún vivo en mi mochila”.

Finalmente, expresa su preocupación por el futuro del sector:

“La esperanza hacia un futuro con más dignidad, en el que pueda tener un espacio donde vivir, un espacio al cual llamar hogar, una vida más digna, se empieza a ver cada vez más difícil al saber que el Ministerio de Cultura, cuando existía por sí solo, no generaba oportunidades suficientes para los artistas. Ahora que se fusiona con el Ministerio de Educación, se siente que esas oportunidades serán mínimas o nulas”.